Albert Llovera-Àlex Haro, a los mandos de un buggy del equipo MD Rally Team, saldaron con buena nota el siempre complicado inicio de una prueba tan dura como el Dakar. Es cierto que, la etapa con más de 800 km, solo tenía 170 km cronometrados, era la primera toma de contacto y según Albert: Muy importante para ir cogiendo confianza. Llovera-Haro acabaron esta primera especial, entre Varadero y Sant Nicolas, en la 60ª posición de la clasificación provisional con un tiempo de 1h38’30” a algo más de 25’ del Mini con los colores de Qatar, pilotado por su amigo Nasser Al-Attiyah, que ha sido el primer ganador de etapa del Dakar 2015.
Al llegar al bivac, Llovera se mostraba satisfecho de esta primera jornada de competición aunque, siempre exigente, pensaba que hubiera podido ir mejor: En la pista había mucho polvo que nos ha dificultado, supongo que a nuestros rivales también, los adelantamientos cuando alcanzábamos a un rival más lento. Hubiéramos podido ir más rápido pero... Lo que comentaba, coger confianza y solucionar pequeños detalles que han ido surgiendo eran el gran objetivo de este primer día de competición. Tal como decía el piloto andorrano, la mecánica siempre se puede mejorar: Ahora intentaremos modificar un poco la situación del backet para pilotar con más comodidad. Además hoy hemos tenido que cambiar una rueda defectuosa antes de empezar la especial y el marcador de la gasolina también ha fallado. En fin nada grave, a prepararnos para mañana que, según dicen, será una jornada mucho más exigente.
La segunda etapa entre Villa Carlos Paz y San Juan se disputará también en tierras argentinas. En total 625 km de los que 518 km serán de velocidad. Podríamos decir que será la primera jornada complicada de la presente edición del Dakar. Antes de iniciar su desplazamiento a Buenos Aires, a Llovera le comentaron la dificultad de esta especial, sobre todo su rapidez y las trampas que esconde la pista. Albert lo tiene muy presente.
Servicio de prensa.
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